Memorial a las y los Jóvenes de los 80's
Nada ni nadie está olvidado
Carmen Gloria Larenas
Nació en 1964 en la Población Sara Braun en el Cerro Placeres, aunque pronto conoció el Cerro Esperanza y Villa América, donde inició su escolaridad y sociabilidad.
De sonrisa ancha y buen humor, abría el corazón de cuantos le conocieron.
Los tiempos de avanzada popular hicieron que su carácter se formara entre esperanzas y desafíos de una sociedad que se reconocía en solidaridad, reciprocidad, luchas y creatividad. Creció en dictadura, contextualizada por la resistencia y tenacidad de una familia y compañeros que practicaban los mismos conceptos de solidaridad y lucha.
Quizás por eso, apenas pudo se plegó a los movimientos sociales desplegando sus diversas facetas desde la militancia en las Juventudes Comunistas, mostrándose como solía ser ella: sencilla, recta y generosa.
Mientras estudiaba en el (ex) Liceo Técnico Femenino de Valparaíso, andariega como fue, participó en una organización que trabajaba con niños, anduvo merodeando en la radio Placeres, y más de alguna tarea desempeñó como ayudista en aquellas acciones que enfrentaban a la dictadura cara a cara y de igual a igual.
En el mes de julio de 1983 el pueblo de Chile estaba de avanzada. El día 12 de ese mes, después de celebrar un año más del natalicio del poeta Pablo Neruda, se había convocado una nueva jornada de protesta. Para ella, que había marchado ya en muchas convocatorias anteriores, esta marcha era importante porque sería en el propio cerro donde militaba.
La brigada regional de la CNI se dispuso en el terreno equipada y apostada para asesinar. Esta vez la muerte teñiría de dolor el cerro Esperanza pero no aniquilaría nuestra esperanza. El pecho de Carmen Gloria fue perforado por alguna de las decenas de balas que cortaron el aire de los cerros del puerto en esa jornada, y nuestra joven militante cayó asesinada en Calle Del Agua, en Recreo.
Carmen Gloria vive y camina con todas y todos cada día de lucha por las calles del puerto.